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Altos Hornos de México (AHMSA), la histórica siderúrgica de Monclova, Coahuila, fue declarada en quiebra este jueves por un juzgado de la Ciudad de México. En virtud de la sentencia, la empresa deberá ser vendida y los fondos obtenidos serán destinados a saldar sus deudas, un proceso que marca un hito en la crisis financiera de una de las compañías más emblemáticas del norte del país. La quiebra de AHMSA es el último capítulo de una serie de problemas que han aquejado a la empresa en los últimos años. En particular, destacan los escándalos de corrupción que involucraron a actores internacionales, como el caso con la constructora brasileña Odebrecht y la polémica venta de la planta de Agronitrogenados a Petróleos Mexicanos (Pemex). Esta última transacción fue uno de los eventos que desencadenó la pérdida de influencia de Alonso Ancira, conocido como el “Rey del Acero” por haber dirigido la empresa desde 1991 hasta su renuncia en abril de 2023. Con su salida del Consejo de Administración, se iniciaba una nueva etapa para AHMSA, pero las dificultades no cesaron.
Desde esa renuncia, AHMSA ha estado bajo el control de Argentem Creek Partners , un fondo de inversión estadounidense especializado en situaciones financieras complejas. Argentem asumió un papel clave en la reestructuración de la empresa y, a través de un crédito solicitado a la Tribu Tradicional Kickapoo de Texas-México, buscó reiniciar las operaciones de la siderúrgica y salvarla de su insolvencia. La Tribu Kickapoo, vinculada con la región y reconociendo la importancia de AHMSA como fuente de empleo, expresó su disposición a apoyar el proceso. A través de este fondo, AHMSA ha sido dirigida en los últimos meses y, actualmente, Argentem Creek Partners es el principal propietario de la empresa. Este fondo ha comprometido una inversión total de 2,200 millones de dólares, que se destinarían a reactivar las operaciones de las siderúrgicas y minas, así como a la instalación de nuevos equipos. Además, otros 1,700 millones de dólares se asignarían para el pago de pasivos financieros acumulados. Desde la intervención de Argentem Creek, AHMSA ha tomado un rumbo distinto con el nombramiento de John Abbot en el consejo de administración. Argentem Creek Partners, conocida por su enfoque en mercados emergentes y situaciones financieras complejas, se especializa en reestructuraciones financieras y oportunidades de deuda en dificultades. Según su página web, su estrategia de inversión se basa en un análisis fundamental propio, con el objetivo de generar resultados de alto valor y colaborar estrechamente con los accionistas y equipos de gestión. A pesar de la intervención de este fondo, la propiedad de AHMSA podría cambiar aún más en el futuro, dado que la empresa está en proceso de venta debido a la declaración de quiebra. Sin embargo, Argentem Creek Partners sigue siendo el principal actor que controla la empresa en esta etapa, guiando el proceso de reestructuración y las decisiones clave para su recuperación. na nueva etapa para AHMSA, pero las dificultades no cesaron. Desde esa renuncia, AHMSA ha estado bajo el control de Argentem Creek Partners, un fondo de inversión estadounidense especializado en situaciones financieras complejas. Argentem asumió un papel clave en la reestructuración de la empresa y, a través de un crédito solicitado a la Tribu Tradicional Kickapoo de Texas-México, buscó reiniciar las operaciones de la siderúrgica y salvarla de su insolvencia. La Tribu Kickapoo, vinculada con la región y reconociendo la importancia de AHMSA como fuente de empleo, expresó su disposición a apoyar el proceso. A través de este fondo, AHMSA ha sido dirigida en los últimos meses y, actualmente, Argentem Creek Partners es el principal propietario de la empresa. Este fondo ha comprometido una inversión total de 2,200 millones de dólares, que se destinarían a reactivar las operaciones de las siderúrgicas y minas, así como a la instalación de nuevos equipos. Además, otros 1,700 millones de dólares se asignarían para el pago de pasivos financieros acumulados. Desde la intervención de Argentem Creek, AHMSA ha tomado un rumbo distinto con el nombramiento de John Abbot en el consejo de administración. Argentem Creek Partners, conocida por su enfoque en mercados emergentes y situaciones financieras complejas, se especializa en reestructuraciones financieras y oportunidades de deuda en dificultades. Según su página web, su estrategia de inversión se basa en un análisis fundamental propio, con el objetivo de generar resultados de alto valor y colaborar estrechamente con los accionistas y equipos de gestión. A pesar de la intervención de este fondo, la propiedad de AHMSA podría cambiar aún más en el futuro, dado que la empresa está en proceso de venta debido a la declaración de quiebra. Sin embargo, Argentem Creek Partners sigue siendo el principal actor que controla la empresa en esta etapa, guiando el proceso de reestructuración y las decisiones clave para su recuperación. Con esta intervención, AHMSA busca no solo superar sus problemas financieros, sino también recuperar su rol como pilar de la economía regional y nacional, tras el descalabro que ha vivido en los últimos años. El proceso de venta y reestructuración está aún en marcha, dejando al sector y a la región en espera de qué sucederá con la siderúrgica en los próximos meses.
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Altos Hornos de México (AHMSA), la histórica siderúrgica de Monclova, Coahuila, fue declarada en quiebra este jueves por un juzgado de la Ciudad de México. En virtud de la sentencia, la empresa deberá ser vendida y los fondos obtenidos serán destinados a saldar sus deudas, un proceso que marca un hito en la crisis financiera de una de las compañías más emblemáticas del norte del país. La quiebra de AHMSA es el último capítulo de una serie de problemas que han aquejado a la empresa en los últimos años. En particular, destacan los escándalos de corrupción que involucraron a actores internacionales, como el caso con la constructora brasileña Odebrecht y la polémica venta de la planta de Agronitrogenados a Petróleos Mexicanos (Pemex). Esta última transacción fue uno de los eventos que desencadenó la pérdida de influencia de Alonso Ancira, conocido como el “Rey del Acero” por haber dirigido la empresa desde 1991 hasta su renuncia en abril de 2023. Con su salida del Consejo de Administración, se iniciaba una nueva etapa para AHMSA, pero las dificultades no cesaron.
Desde esa renuncia, AHMSA ha estado bajo el control de Argentem Creek Partners , un fondo de inversión estadounidense especializado en situaciones financieras complejas. Argentem asumió un papel clave en la reestructuración de la empresa y, a través de un crédito solicitado a la Tribu Tradicional Kickapoo de Texas-México, buscó reiniciar las operaciones de la siderúrgica y salvarla de su insolvencia. La Tribu Kickapoo, vinculada con la región y reconociendo la importancia de AHMSA como fuente de empleo, expresó su disposición a apoyar el proceso. A través de este fondo, AHMSA ha sido dirigida en los últimos meses y, actualmente, Argentem Creek Partners es el principal propietario de la empresa. Este fondo ha comprometido una inversión total de 2,200 millones de dólares, que se destinarían a reactivar las operaciones de las siderúrgicas y minas, así como a la instalación de nuevos equipos. Además, otros 1,700 millones de dólares se asignarían para el pago de pasivos financieros acumulados. Desde la intervención de Argentem Creek, AHMSA ha tomado un rumbo distinto con el nombramiento de John Abbot en el consejo de administración. Argentem Creek Partners, conocida por su enfoque en mercados emergentes y situaciones financieras complejas, se especializa en reestructuraciones financieras y oportunidades de deuda en dificultades. Según su página web, su estrategia de inversión se basa en un análisis fundamental propio, con el objetivo de generar resultados de alto valor y colaborar estrechamente con los accionistas y equipos de gestión. A pesar de la intervención de este fondo, la propiedad de AHMSA podría cambiar aún más en el futuro, dado que la empresa está en proceso de venta debido a la declaración de quiebra. Sin embargo, Argentem Creek Partners sigue siendo el principal actor que controla la empresa en esta etapa, guiando el proceso de reestructuración y las decisiones clave para su recuperación. na nueva etapa para AHMSA, pero las dificultades no cesaron. Desde esa renuncia, AHMSA ha estado bajo el control de Argentem Creek Partners, un fondo de inversión estadounidense especializado en situaciones financieras complejas. Argentem asumió un papel clave en la reestructuración de la empresa y, a través de un crédito solicitado a la Tribu Tradicional Kickapoo de Texas-México, buscó reiniciar las operaciones de la siderúrgica y salvarla de su insolvencia. La Tribu Kickapoo, vinculada con la región y reconociendo la importancia de AHMSA como fuente de empleo, expresó su disposición a apoyar el proceso. A través de este fondo, AHMSA ha sido dirigida en los últimos meses y, actualmente, Argentem Creek Partners es el principal propietario de la empresa. Este fondo ha comprometido una inversión total de 2,200 millones de dólares, que se destinarían a reactivar las operaciones de las siderúrgicas y minas, así como a la instalación de nuevos equipos. Además, otros 1,700 millones de dólares se asignarían para el pago de pasivos financieros acumulados. Desde la intervención de Argentem Creek, AHMSA ha tomado un rumbo distinto con el nombramiento de John Abbot en el consejo de administración. Argentem Creek Partners, conocida por su enfoque en mercados emergentes y situaciones financieras complejas, se especializa en reestructuraciones financieras y oportunidades de deuda en dificultades. Según su página web, su estrategia de inversión se basa en un análisis fundamental propio, con el objetivo de generar resultados de alto valor y colaborar estrechamente con los accionistas y equipos de gestión. A pesar de la intervención de este fondo, la propiedad de AHMSA podría cambiar aún más en el futuro, dado que la empresa está en proceso de venta debido a la declaración de quiebra. Sin embargo, Argentem Creek Partners sigue siendo el principal actor que controla la empresa en esta etapa, guiando el proceso de reestructuración y las decisiones clave para su recuperación. Con esta intervención, AHMSA busca no solo superar sus problemas financieros, sino también recuperar su rol como pilar de la economía regional y nacional, tras el descalabro que ha vivido en los últimos años. El proceso de venta y reestructuración está aún en marcha, dejando al sector y a la región en espera de qué sucederá con la siderúrgica en los próximos meses.
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